sábado, 30 de abril de 2011

Teñido de la madera


Extractos de nogal, caoba y anilina naranja. Los tres son solubles en agua.

Estos son los pigmentos que he utilizado para mi último trabajo. Aún hay alguno que se sorprende cuando me ve mezclando estos polvos como si de un alquimista se tratara. Pero nada más lejos de la realidad, lo único que tenemos en común, es el resultado sorprendente que siempre sale de la mezcla.

Combinar estos elementos tiene lo suyo, quiero decir.... hay que tener práctica, pero no es nada difícil si te lo propones.
En el mercado se pueden encontrar los tintes para madera ya preparados y con distintas disoluciones: al agua, al disolvente, al alcohol, etc. Yo prefiero fabricarlo en mi taller, además, a la hora de trabajar es más práctico pues son más reversibles.



Mesa antes de la restauración.


 Cata de limpieza.
 Mesa limpia.
 Mesa teñida. Detalle esquina .

En esta última foto está la superficie teñida. Para saber si el color que nos ha quedado es el satisfactorio, entes de proceder al encerado, humedecemos la superficie con alcohol, éste no levantará el color y nos proporcionará una lectura correcta del mismo.

A imagen y semejanza de este modelo se ha ejecutado una pieza de igual diseño pero de inferiores proporciones. Para ver como quedaría, se procedió a realizar una recreación en el ordenador y el resultado fue el siguiente:

El resultado nos pareció satisfactorio, de tal modo que el siguiente paso sería preparar el material: Para ello, contaba con madera de la misma partida que se utilizó para  la mesa antes mostrada.


 Material para patas y costados
 Material para las dos tapas.

Una vez seleccionada la madera sólo faltaba ponerse manos a la obra. La preparación de la madera para el torno es sencilla, se hacen unas aspas en ambos extremos para engarzar la pieza en el torno y se cepillan las ángulos rectos de la pieza para que el encare con la gubia no sea demasiado brusco. Éstos pasos preliminares son secillos pero muy importantes pues de su correcta ejecuci'on resultar'a un buen torneado.


El aspa está centrada, sólo faltaría cepillar ángulos.

La ejecución del torneado requiere precisión y práctica, pues un pequeño desliz nos puede estropear la materia prima.



Una vez torneadas las cuatro patas se preparo el resto de piezas necesarias para formar la mesa.

 Despiece.

En la imagen vemos, las dos tapa, los costados y las cuatro patas torneadas. El trabajo duro  esta realizado, ahora solo queda encolar las piezas. El encolado es relativamente sencillo, la única precaución que hay que tener es que el conjunto este a escuadra, para ello la colocaci'on de los gatos de apriete es fundamental.

Como resultado de estos trabajos previos, aqu'i os dejo las fotos de la pieza tras el encolado y con el acabado, en este caso encerada con cera virgen.

 Pieza encolada.




 Mesa terminada con cera virgen.








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